domingo, 12 de octubre de 2014

cupcakes básicos de vainilla

¡Feliz día del Pilar! a todas las que así os llamáis...

Mi amiga Sara, me regaló el año pasado el libro de Alma Obregón "Cupcake perfecto" y tenía pendiente probar alguna de sus recetas, que tiene todas una pinta...

Para estrenarme, y ser la primera vez, no está mal del todo, creo yo. De sabor están buenísimos.

Ingredientes para el bizcocho:

115 gr. de mantequilla
220 gr. de azúcar blanco
3 huevos
200 gr. de harina
1 y 1/2 cucharadita de levadura
120 ml. de leche semidesnatada
1 cucharadita de extracto de vainilla

Ingredientes para el almíbar:

100 gr. de azúcar blanco
100 ml. de agua
1 cucharadita de extracto de vainilla más las semillas de la vaina

Ingredientes para decorar:

120 gr. de mantequilla
300 gr. de azúcar superfino
125 gr. de queso cremoso de untar (no light)
1 cucharada de leche semidesnatada
1 cucharadita de extracto de vainilla
colorante en pasta (opcional)

Yo he escogido esta vez para decorar la crema de queso, pero podíamos hacer también la crema básica de mantequilla, otro día probaré con ésta.

Elaboración de las cupcakes:

Precalentamos el horno y preparamos la bandeja para cupcakes con las cápsulas de papel. Tamizamos la harina con la levadura en un cuenco y reservamos.

Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se integren y la mezcla se aclare. Añadimos los huevos, uno a uno, batiendo hasta que se incorporen. Después echamos la mitad de la harina y batimos a velocidad baja hasta que se mezcle.

A continuación, vertemos la leche con el extracto de vainilla disuelto, y volvemos a batir. Agregamos la otra mitad de la harina y batimos a velocidad baja hasta que la mezcla sea homogénea.

Repartimos la mezcla en las cápsulas y horneamos unos 22 ó 25 minutos.

Mientras se hornean los cupcakes, preparamos el almíbar en un cazo, calentando el azúcar con el agua hasta que la mezcla hierva. Retiramos del fuego, e incorporamos el extracto de vainilla y las semillas de la vaina, y dejamos templar.

Nada más sacar los cupcakes del horno, pinchamos la superficie varias veces y los pintamos con el almíbar. Dejamos enfriar los cupcakes por completo.

Elaboración de la crema de queso:

Tamizamos el azúcar superfino. A continuación, lo batimos con la mantequilla y la leche a velocidad máxima hasta que se integre.

Añadimos el queso, que ha de estar frío, y batimos, primero a velocidad baja y luego aumentando la velocidad hasta que la mezcla sea homogénea y cremosa. Cuanto más batamos mayor consistencia tendrá la crema. Ha de conservarse en frío.

La ponemos en una manga pastelera, con una boquilla de estrella abierta y decoramos los cupcakes.

A mí, no sé si habrá sido porque hacía calor... la decoración ha perdido un poco la forma, pero no ha llegado a escurrir. Y están buenísimos. Habrá que practicar más con la decoración...

¿A alguien le apetece un dulce?


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